Consejos para elegir residencia de mayores post-covid

Si bien en uno de nuestros primeros artículos de este blog ya hablamos de las principales cuestiones a tener en cuenta para elegir una residencia de mayores, después de la pandemia han aflorado aspectos que también es importante considerar y que se añaden a la lista.

Hasta la llegada del COVID19, los principales aspectos que decíamos que era bueno tener en cuenta eran:

• Ubicación

Buscar un centro residencial próximo a los servicios que la persona mayor pueda necesitar (centros médicos o centros de salud) y a su lugar de residencia o al de sus familiares cercanos, para así facilitar las visitas.

• Servicios del centro

Cada persona mayor tiene unas necesidades específicas, con lo que deberemos procurar que los servicios del centro sean los adecuados a sus necesidades.

• Edificio, instalaciones y mobiliario.

También deberemos valorar la confortabilidad de las habitaciones y zonas comunes, así como el correcto mantenimiento de las instalaciones y el mobiliario. En este punto, ahora seguramente valoraremos más las residencias que dispongan de espacios abiertos como patios, jardines, etc.

• Precio

El precio siempre es uno de los parámetros más importantes a valorar, pues es totalmente necesario que se ajuste a lo que la persona mayor o la familia pueda asumir mensualmente. Aunque los precios de las residencias de ancianos pueden variar mucho entre comunidades autónomas, estamos hablando de un precio medio de cercano a los 2.000 euros mensuales para las plazas privadas. Sin embargo, este factor puede pasar a un segundo plano cuando disponemos de opciones que facilitan el pago, como por ejemplo, el programa Pensium.

• Atención y normativa interna

También es importante valorar el tipo de atención del centro, y aspectos de normativa interna como horarios de visitas, horarios de entrada y salida, horarios de comida, etc.

¿Qué nuevos aspectos es importante considerar ahora?

 Además de los conocidos, ahora deberemos poner especial atención también a aspectos como:

• Protocolo interno para la prevención del contagios

En este punto podemos estar tentados a preguntar cuál ha sido la situación de la residencia durante la pandemia: número de afectados, número de defunciones…y es muy normal que preguntemos y nos informemos sobre ello. Sin embargo más importante que el pasado es el futuro y, haya pasado lo que haya pasado, lo que realmente nos interesa saber son las medidas que se están tomando hoy para prevenir los contagios.

Es importante que tengamos en cuenta que muchas de las residencias que han sido afectadas por la pandemia no ha sido por hacer las cosas mal, sino que en muchos casos ha sido por una importante falta de recursos y porque el colapso del sistema sanitario ha dificultado la realización de test diagnósticos y el traslado de enfermos de edad a los centros hospitalarios.

Es por ello que a la hora de juzgar la calidad del servicio de una residencia de mayores, no podemos centrarnos en el impacto que hasta ahora la pandemia haya podido tener sobre ella, sino en las medidas tomadas y en los protocolos adquiridos para garantizar al máximo la seguridad presente y futura.

Dicho esto, en este punto deberemos valorar todo lo que ya hemos venido diciendo en nuestros últimos artículos:

• Limpieza y desinfección del centro
• Protocolos de entradas y salidas, tanto de usuarios como de visitas
• Medidas de higiene individual
• Disponibilidad de equipos de protección para empleados y residentes

• Protocolo ante un posible brote de COVID19

Tan importante como conocer los protocolos de prevención será conocer el protocolo de actuación previsto en el caso de que haya un rebrote y éste afecte a la residencia. ¿Cómo tiene previsto actuar la residencia en caso de detectar un positivo internamente? ¿Tiene suficiente espacio para organizar correctamente zonas de aislamiento?

En este punto, sin embargo, hay que tener en cuenta que en caso de un nuevo episodio de contagios, tanto los centros residenciales como los centros sanitarios estarán más preparados para actuar de manera mucho más rápida. La experiencia adquirida en el proceso de contagio y en los sistemas de protección contra el virus, junto con la mayor disponibilidad de equipos de protección y de test, serán claves para la contención de cualquier nuevo brote.

Recordemos que la mejor forma de estar tranquilos y de tomar buenas decisiones es disponer de toda la información necesaria para realizar una correcta valoración del centro residencial. Por su parte, la residencia debe ser transparente con nosotros y facilitarnos, a poder ser por escrito, toda la información que solicitemos, especialmente en un tema tan sensible como es el del COVID-19. Así que no tengamos miedo a preguntar, es una decisión suficientemente relevante como para no quedarnos con ninguna duda