Inicio de la campaña antigripal
Hace apenas dos días que se ha dado el pistoletazo de salida a la campaña de vacunación de la gripe de este año, y es importante recordar la importancia de esta vacuna, especialmente en los grupos de riesgo entre los que, por cierto, este año se han añadido los bebés prematuros.
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¿Qué es la gripe?
La gripe es una enfermedad vírica muy contagiosa, ya que se transmite a través de las pequeñas gotitas que emitimos al hablar, toser o estornudar, y que en las personas causa una infección respiratoria aguda.
Los síntomas más comunes suelen ser fiebre, dolor muscular general, tos, irritación ocular, mucosidad y estornudos. Éstos pueden variar y a veces pueden confundirse con otras enfermedades comunes, como el resfriado común.
Su tiempo de incubación suele ser de uno o dos días y su duración, entre una y dos semanas.
¿Cómo podemos prevenirla?
La mejor opción, sin duda, es la vacunación. Estas vacunas han demostrado ser altamente eficientes y seguras, reduciendo las complicaciones especialmente en ancianos y personas con enfermedades crónicas.
¿Quién debe vacunarse?
Cada año se revisan los grupos de riesgo y edad a los que se les recomienda la vacunación según los estudios publicados y tras la revisión de los datos referentes a las epidemias recientes.
Principalmente, los grupos con más riesgo, y a los que se aconseja la vacunación, son los niños pequeños, las mujeres embarazadas, los profesionales sanitarios, los cuidadores y profesionales geriátricos, los enfermos crónicos y los mayores de 60 años.
¿Dónde puede vacunarse?
En los centros de atención primaria y hospitales, solicitando hora previa, podrá vacunarse de manera gratuita.
¿Debo vacunarme cada año?
El virus que causa la gripe está en constante evolución, cambiando rápidamente sus características y haciendo que no pueda utilizarse un medicamento concreto para su tratamiento. Por eso, se recomienda la vacunación anual para estar preparado ante las mutaciones del mismo.
Este año la vacuna antigripal tetravalente recomendada por la OMS incluye cuatro cepas del virus, buscando la mayor protección posible ante los cambios que va experimentando el virus de la gripe.
¿Cómo podemos tratarla?
Es importante seguir una serie de recomendaciones en el caso de que esté pasando un cuadro gripal.
– Descanse. El cuerpo necesita guardar reposo para recuperarse a la mayor brevedad posible.
– No consuma alcohol ni tabaco. Su consumo puede empeorar los síntomas y complicar su evolución.
– Beba mucho líquido para evitar la deshidratación. Puede tomar suero fisiológico, infusiones o simplemente agua.
– Si tiene fiebre puede controlarla con antitérmicos o analgésicos que le recomienden su farmacéutico o médico.
– No tome antibióticos. La gripe es un proceso viral por lo que los antibióticos, que sólo combaten las bacterias, no le ayudarán a mejorar.
– Lávese con frecuencia las manos con agua y jabón para evitar el contagio. También es importante cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo de papel cuando estornude o tosa. El pañuelo sucio no debe reutilizarse y debe tirarse a la basura.
¿Cuándo debo acudir al médico de cabecera?
– Si forma parte de algún grupo de riesgo y no se ha vacunado.
– Si, estando en reposo, tiene problemas para respirar con normalidad.
– Si tras diez días sigue teniendo tos.
– Si la fiebre no desaparece a pesar del tratamiento.
Siempre que pueda, evite acudir a los servicios de emergencia y pida hora a su médico de cabecera para que lo reconozca y le aconseje el tratamiento a seguir en cada caso.
En todo caso, como siempre es mejor prevenir que curar, desde Pensium recomendamos a todas las personas pertenecientes a los colectivos de riesgo que se vacunen, teniendo en cuenta que el período óptimo para hacerlo es desde esta semana hasta el 15 de diciembre.