Enfermedades y dolencias de las personas mayores durante el verano ¿Cómo podemos evitarlas?
El verano es una temporada que nos invita a disfrutar del aire libre y actividades recreativas, pero también conlleva desafíos particulares para las personas mayores. Las altas temperaturas, la exposición solar intensa y otros factores propios de esta estación pueden aumentar el riesgo de diversas enfermedades y dolencias. En este artículo, exploraremos algunas de las afecciones más comunes que afectan a las personas mayores durante el verano, y ofreceremos algunos consejos para prevenirlas y cuidar su salud. Abordaremos en detalle la importancia de la prevención de la hipertemia, las ITU, la insuficiencia cardíaca, las picaduras de insectos y la otitis externa.
Deshidratación:
La deshidratación es un problema común en los adultos mayores durante el verano debido a la pérdida excesiva de líquidos a través de la transpiración. ¿CÓMO PREVENIRLA?: es esencial que los mayores beban suficiente agua a lo largo del día y eviten el consumo excesivo de bebidas alcohólicas o con cafeína, ya que pueden aumentar la deshidratación. Además, se pueden ofrecer alimentos ricos en agua, como frutas y verduras, para mantener un buen nivel de hidratación.
Infecciones respiratorias:
Las infecciones respiratorias, como la neumonía y la bronquitis, pueden ser más frecuentes en las personas mayores durante el verano debido a los cambios bruscos de temperatura entre ambientes con aire acondicionado y exteriores calurosos. ¿CÓMO PREVENIRLAS?: es importante mantener una temperatura agradable y estable en los espacios interiores, evitar los cambios bruscos de aires y, en caso de síntomas respiratorios, buscar atención médica de inmediato.
Quemaduras solares:
La piel de los adultos mayores es más susceptible a las quemaduras solares debido a los cambios asociados con el envejecimiento. ¿CÓMO PREVENIRLAS?: es fundamental que utilicen protector solar de amplio espectro con un factor de protección alto, ropa de manga larga, sombreros y gafas de sol para protegerse del sol. Además, se debe evitar la exposición directa al sol durante las horas pico y buscar sombra siempre que sea posible.
Hipertemia:
La hipertemia es una condición en la que el cuerpo se sobrecalienta debido a la exposición prolongada a altas temperaturas. Es especialmente peligrosa en las personas mayores, ya que su capacidad para regular la temperatura corporal puede verse comprometida. ¿CÓMO PREVENIRLA?: es importante que las personas mayores eviten la exposición al sol durante las horas más calurosas, se mantengan hidratados, utilicen ropa ligera y busquen lugares frescos. Si se sospecha de hipertemia, se debe buscar atención médica de inmediato.
Infecciones del tracto urinario (ITU):
Las ITU son más comunes en las personas mayores debido a los cambios en el sistema urinario relacionados con el envejecimiento. Durante el verano, la sudoración excesiva y la falta de hidratación adecuada pueden aumentar el riesgo de ITU. ¿CÓMO PREVENIRLAS?: es fundamental que los adultos mayores beban suficiente agua, eviten retener la orina durante períodos prolongados, mantengan una buena higiene personal y utilicen ropa interior de algodón transpirable. Además, se recomienda buscar atención médica ante cualquier síntoma de ITU, como dolor o ardor al orinar, necesidad frecuente de orinar o cambios en el olor o color de la orina.
Insuficiencia cardíaca:
La insuficiencia cardíaca es una afección crónica en la que el corazón no puede bombear suficiente sangre para satisfacer las necesidades del cuerpo. Durante el verano, el calor puede ejercer una carga adicional en el sistema cardiovascular de las personas mayores. ¿CÓMO PREVENIRLA?: Es importante que los adultos mayores con insuficiencia cardíaca sigan las recomendaciones de su médico, eviten la exposición excesiva al calor y realicen actividades físicas moderadas en ambientes frescos. Además, deben controlar su ingesta de líquidos y limitar la sal en su dieta.
Picaduras de insectos:
Las picaduras de insectos como abejas, mosquitos, arañas y avispas, entre otros, pueden causar molestias y reacciones alérgicas en las personas mayores durante el verano. ¿CÓMO PREVENIRLAS?: Es importante que utilicen repelente de insectos, eviten áreas donde los insectos son más frecuentes y utilicen ropa protectora, como pantalones largos y mangas largas.
Otitis externa:
La otitis externa, también conocida como “oído de nadador”, puede ser más común en las personas mayores durante el verano debido a la exposición al agua de piscinas o playas. ¿CÓMO PREVENIRLA?: es importante secar bien los oídos después de nadar o ducharse y evitar la entrada de agua en los conductos auditivos. Además, se recomienda utilizar tapones para los oídos y mantener una buena higiene auditiva.
En resumen, al tomar las precauciones adecuadas, podemos prevenir y cuidar de manera efectiva las enfermedades y dolencias comunes durante esta temporada. Es fundamental recordar la importancia de la prevención, adoptando medidas como evitar la exposición excesiva al sol, mantener una adecuada hidratación, mantener una buena higiene personal y seguir las recomendaciones médicas. Al hacerlo, estaremos asegurando el bienestar de nuestros seres queridos mayores y les permitiremos disfrutar del verano de forma segura y saludable.
Si necesitas más información sobre este y otros temas relacionados con el cuidado de las personas mayores en verano, lee este artículo en el blog de PENSIUM ¿Cuál es la temperatura ideal en el hogar para el bienestar de los mayores?
Desde PENSIUM, además, fomentamos el apoyo a las personas mayores con dependencia y a sus familias a través del programa Pensium, el cual ayuda a tener los recursos necesarios para afrontar el pago de los cuidados asistenciales de las personas mayores.
